martes, 21 de febrero de 2012


FRANCISCO CALATRAVA JURADO 

 Tabernas ( Almería), 6 de marzo de 1896
 Acalá de Guadaíra, 6 de febrero de 1967
A pesar de estar confirmado en sus propios escritos el lugar y fecha de nacimiento, no figura inscrito en el registro de nacimientos de su pueblo natal. No es más que un primer dato llamativo en el caso de una persona cuya vida calificó Frenando de los Ríos y Guzmán como “novela”. Hijo póstumo, padeció las sombras de la orfandad hasta que de ella lo sacaron los generosos sentimientos de José Rosa Plata y de María Fenoy Lozano.

Empezó su vida laboral haciendo recambios de caballerías, allá por el año 1908, en la venta llamada El Chortal, a cuatro kilómetros de Tabernas. Luego emigró a Argentina, donde arrastró una odisea de penalidades y trabajos, entre ellos ser guardagujas en la estación de Toro del Carril Central de Buenos Aires con un sueldo de 90 pesos mensuales. En 1914 regresa a España, iniciándose en su nueva actividad de picapedrero en tierras de Almería.

En 1924 llega a Alcalá de Guadaíra, donde se asentará definitivamente. Primeramente se dedicó a dar clases particulares, y más tarde, como administrativo en el almacén de aceitunas de Francisco Gutiérrez Calderón. Será entonces cuando comienza a desarrollar y dar a conocer sus cualidades literarias colaborando en la revista Oromana y en la revista de Feria de Alcalá de Guadaíra. Así mismo publicará varios libros.

Amantina Cobos en relación a su personalidad nos dice “parece que en Francisco Calatrava hay dos personalidades distintas y aún antagónicas: el poeta delicado, el artista prodigioso de la pluma con la que hace maravillosas filigranas, y el obrero de la tierra en cuyo trabajo sus manos encallecieron, aunque su espíritu se conservó puro y diáfano como agua clara en que se reflejan todas las bellas cosas que la rodean”.

DE VUELTA AL REDIL

De apacentar mi grey vuelvo contento,
del verde otero a la floresta umbría;
pronto a ocultarse el resplandor del día,
voy tras de mi rebaño a paso lento.
Corre, apacible, el vespertino viento,
refrescando la abrupta serranía,
montes de exuberante lozanía
a los que absorto yo contemplo atento.
Y el alma llevo de alegría henchida
ensando en el redil y en quien me espera,
soñadora mujer, luz de mi vida.

AMIGO VASCONCELLOS.
¡Amigo Vasconcellos,
qué tiempos aquellos!
 De lirón, lirín, castaña,
que desde la Gran Bretaña
a nuestra noble España
rodaba rutilante de oro,
tan rubio y tan sonoro,
y en rauda catarata,
níquel, cobre y plata.

 ¡Qué tiempos aquellos,
 amigo Vasconcellos!
Do el infelices pobre
cuyo placer estriba
del mundo en su deriva
en masticar
y reventar
antes que sobre;
y al igual que el rico
de aquí o de  Puerto Rico,
de la Habana o de Tampico,
adquirir podía
y como él quería,
dentro o fuera,
según su faltriquera,
los tiernos cabritillos,
valencianos pepinillos,
morcones de Escalona,
de Jabugo o de Narbona.
Y ya pasada palidez de otoño,
conservados y en montones
la algarroba y el madroño,
y coloradísimos morrones
de Lora, Brenes y Logroño.
 ( de Amigo Vasconcellos, qué tiempos aquellos.)


lunes, 24 de octubre de 2011

JUAN RAMÓN JIMÉNEZ

Con lilas llenas de agua,
le golpeé las espaldas
y toda su carne blanca
se enjoyó de gotas claras...

Amigos aficionados a la poesía: el jueves próximo, dia 27 a las 20.00 horas, estáis invitados a nuestra tertulia Poemas de Plata. Ya sabeis que nos reunimos todos los últimos jueves de cada mes para rendir un pequeño homenaje a los poetas andaluces, que son muchos. Como habéis visto, en esta ocasión seguimos con Juan Ramón Jiménez, poeta onubense como todos sabemos.
Os esperamos en la calle La Plata 31 bajo, en Alcalá de Guadaíra, en Sevilla.

jueves, 25 de agosto de 2011

EL HOSPICIO. ANTONIO MACHADO


Es el hospicio, el viejo hospicio provinciano,
el caserón ruinoso de ennegrecidas tejas
en donde los vencejos anidan en verano
y graznan en las noches de invierno las cornejas.
Con su frontón al Norte, entre los dos torreones
de antigua fortaleza, el sórdido edificio
de grietados muros y sucios paredones,
es un rincón de sombra eterna. ¡El viejo hospicio!
Mientras el sol de enero su débil luz envía,
su triste luz velada sobre los campos yermos,
a un ventanuco asoman al declinar el día,
algunos rostros pálidos, atónitos y enfermos,
a contemplar los montes azules de la sierra;
o, de los cielos blancos, como sobre una fosa,
caer la blanca nieve sobre la fría tierra,
¡sobre la tierra fría la nieve silenciosa!

viernes, 22 de abril de 2011

HOMENAJE A NOCHES DEL BARATILLO

POEMAS DE PLATA

El pasado día 7 de abril tuvo lugar en la biblioteca Editor José Manuel Lara, un encuentro poético promovido por el “Foro Oromana”. Con la asistencia de numeroso público, la velada poética consistió en una “Ronda de Rimas” en la que los poetas alcalareños María del Águila Boge, Manuel Antúnez, Ana Corral, Mari Carmen López y Lucre Romero, pertenecientes al grupo “Poemas de Plata", compartieron espacio con el Decano grupo literario “Noches del Baratillo".





martes, 22 de febrero de 2011

I RECITAL POÉTICO POEMAS DE PLATA

VEN, SE ACERCA LA NOCHE

Ven,
se acerca la noche.
Los miedos se esfuman y quedamos solos tú y yo.
Ven,
más cerca, más, más, más.
La química humana funciona.
La fusión es un proceso de amor
de elementos afines que se unen
y se crea un elemento compuesto
nuevo, completamente nuevo.
La química humana funciona.
Mmmmmmmmmm.

Navego hacía la estridencia
en busca de algo nuevo que motive tu sonrisa.
Tu sonrisa me altera y me emborracha de amor.
Borracho de querer, te quiero.
Cansado de mirar , te admiro.
Tu luna brilla en mis noches más oscuras.
Tu inteligencia me llena
y narcotiza nuestro tiempo.

Subamos al tren,
que tu aliento refresque mi espacio.
Quiero ser pistilo de una flor silvestre
... y tu mariposa.
La rosa no es rosa si no se la mira desde la locura.
Subamos al tren..., a gozarlo bien, viviendo el vaivén;
libres de ataduras, sin las armaduras,
buscando vivencias.


El fuego ha empezado.
Respiras, me ensalzo;
te enciendes, te apago;
te callas, me cayo;
descansas, descanso.
¡Silencio...!
Que callen las cosas:
el palpitar del reloj, los avisos de la lavadora, los grifos imperfectos.
¡Silencio...! ¡Silencio...!
Que el tiempo destape la esencia de la complacencia.

José Luis González Cáceres ( Noches del Baratillo)

NUNCA TE DI ESE BESO

Nunca te di ese beso
que tú no me pediste
y que siempre tenía
dispuesto entre mis labios;
que me sangraba, preso,
y me apretaba el alma;
que triste se moría,
dolido y olvidado.

Nunca te di ese beso
de rosas espinadas
que andaba por mi boca
huérfano de destino;
secándose en la noche,
pudriéndose despacio,
volviéndoseme amargo
y desabrido.

Nunca te di ese beso
que tanto deseaba
dejar como un murmullo
en tus labios de agua.

Nunca te di ese beso
que envejece a mi lado,
que nadie en estos años
de mi boca ha robado.

Nunca te di ese beso
de rosas perfumadas
que guardé para ti
como joya labrada

-suspiro ensordecido,
anhelo marchitado,
ansias por alcanzar
el cielo de tus labios-.

Nunca te di ese beso
que extraño deambulaba
por noches sin estrellas
en busca de tu playa.

Nunca te di ese beso
que ya me nació herido,
sin boca que quisiera
tenerlo de inquilino.

Nunca te di ese beso
que hoy aún me trastoca
y me hiere los labios
como espinas de rosa

-crepúsculos llorados,
jardín ensombrecido,
triste historia sin fin
del beso que no ha sido-.
Mª Paz Cerrejón. ( Noches del Baratillo)

BAJO EL TAMARINDO

La noche que me "perdí",
era noche de grillos y estrellas,
la luna no quiso salir,
quizás por vergüenza
Él sólo me vió una vez,
y sus ojos se encendieron
de pasión y de deseo,
y sin que nadie le oyera,
me dijo: bajo el tamarindo
a media noche te espero, morena.
Bajo el tamarindo a media noche estaba
cuando oí el trote de su caballo
acercarse en la madrugada.
Me subió a la grupa y me llevó a su cabaña,
y como un paquete regalo envuelto
en cintas blancas, me desató
el corpiño bordado, después con cuidado,
las enaguas almidonadas,
en plena desnudez quedé,
ante su acariciadora mirada.
La noche que me "per...", no,
no me perdí, me encontré,
era noche de grillos y estrellas
y la luna no quiso salir,
!de purita envidia perversa!

Dorka Cervantes ( Noches del Baratillo)

EN TU VIENTRE LA SEMILLA…

A mi hija Loreto.

En tu vientre la semilla
germinó, y ya ha brotado,
en tus brazos lo esperado
reposa envuelto en mantilla.
Es inmensa maravilla
contemplar ser tan precioso,
que mi sentir codicioso
atrapa presto el momento,
todo es puro sentimiento
ante rito tan hermoso.

LORETO MORA JIMÉNEZ ( Noches del Baratillo)

LA HERENCIA DEL TIEMPO

Soy mujer,
arrastro la condena de dolores antiguos.
Fui violada, oprimida, humillada,
ignorada,,mancillada, destruida.
Esclava negra en la hacienda del amo,
en los ritos paganos, ofrenda,
y en la hoguera de llamas infames,
devorada por bruja.
Soy mujer,
culpable de los males de la tierra
y aún así, invisible para el mundo.
Y qué me importa
si llevo en mi vientre
el alimento de la vida,
el calor de mi sangre,
y la herencia del tiempo.

Manuela Dominguez ( Noches del Baratillo)

CARTA A DON ANTONIO MACHADO

Mi querido amigo Antonio:
Espero, que al recibo de la presente,
estés donde estés, sea con encomio ,
así todos nos alegraremos cumplidamente.

Sabrás, por aquí, de menos te echamos:
trovadores de canciones, manifiestos,
hasta el tran-tran de aquel tren, ahora reclamamos.

Quisiéramos traerte a esta tu tierra
pero…¿para qué?, ahora tienes la paz
que tanto deseaste, ¡maldita guerra!
Allí también te quieren veraz

¡Igual que si fueras de ellos!
Conocerás: tu querido río, que a Soria
acaricia con la misma gloria,
mas, con tantas presas, algún agua da de menos,
que hicieron por el que te fuiste.
Estarás al tanto, ¡incluso él marchó!,
lo decías, somos poco más que un ardite:
Unas en blanco, otras en negro, total un dominó.

Por lo demás, las cosas de ahora,
aun con publicidad, no han cambiado mucho,
¿o sí?...La democracia, Internet, ¡los mismos aguiluchos!,
la crisis, y los pobres trabajando desde la aurora.

¡ Y es que tenías tanta razón al pasar!,
que todo son estelas pintadas,
con alegría a las penas cantar,
haciendo caminos para baladas.

Sólo …“ estelas en la mar”

José María Moreno Ibáñez ( Noches del Baratillo)


Era el mundo y la mañana,
la risa turquesa,
el acero de la niebla,
la flor ahogada,
el surco abierto,
la miel en las manos,
el agua en la vista,
la luz en tus labios,

el mundo en tus ojos.

Era el mundo tal cual,

sin metáforas,

palabra viva,

y nosotros.

Lola Crespo (Grupo Enredando)

NOCHE DE JUERGA

Noche fría y de lluvia como la que más,
sin una mala pelliza que ponerse
baja del castillo un gitano,
en la cabeza un prexilax
"pa" protegerse del agua que caía sin parar,
pues en la venta platilla lo esperan para cantar.

Gonzalo el dueño de la venta
organizador de todo todo tipo de fiestas,
aconseja a todos los artistas como tienen que actuar,
(pués el "gaché" que esperan parece nuevo en este tipo de local)
"Tó" el mundo está preparado pues el señorito está a punto de llegar.

Mientras tanto de la cocina sale un olorcillo que no se "pué" aguantar
a caldito de puchero y a "pringá".
La chacina la están terminando de cortar:
jamón , caña de lomo, morcón, y quesos de la mejor calidad,
que no vayan a faltar.

El vino por garrafas de arroba (mosto de Gibraleòn)
Y para las señoritas, cerveza de la cruz y vino pasa
de Málaga que es el que más calorcito da.
"Cantaó" y guitarrista preparan ya su guión.
"Pa" "empezá" un poquito por fiestas;
unas alegrías de Cádiz , bulerías de Jerez, tonás, tientos y mirabrás.
Y después "habé" el señorito lo que quiere escucha.
Le comenta el guitarrista,
Manolitio "tiés" hoy la voz "mu" "apagá".
Cómo "quiés" que la tenga
si mi Enriquillo "tié" fiebre y mi Hiniesta no para de llorar,
pues "jace" tres dias que no "jierve" la olla en mi cueva,
y más "jambre" no "puen" "pasá".
("pa" "calentá" la voz , Manolito entona una soleá de Alcala).
Mientras con la manga de su "raía" chaqueta
se limpia las lágrimas que lo están a punto de "ajogá".
(y con otra letra más termina de "calentá").
Ya ha "llegao" el señorito, ¡buen porte si señor!
Bien "vestío", traje negro a medida, camisa blanca y corbata
y "pá" "rematá" un gabán.

Por cierto, le acompañan dos sobrinas, ó por eso las hace pasar;
¡Pues es "casao" el muy charrán!
Dirigiéndose al gitano le dice:" vengo a divertirme y a "escuchá" buen cante",
así que "pa" "empezá" me vas a "cantá":
Malagueñas del mellizo, Granaínas de Chacon,
Carceleras de Manolo Caracol, Bulerías de Fernanda y de Bernarda,
un poquito por el Platero de Alcalá y por Bernardo el de los Lobitos,
por Joaquin el de la Paula y Manolito el de Maria.
Ah, por estos dos mucho, pero que mucho por soleá de Alcalá.

"Cantaor" y guitarrista no han parado de actúar,
son las seis de la mañana y como no han "probao" de "ná",
las tripas no las "puen" "dejá" "callá".

La fiesta ya ha "terminao", el señorito ha "quedao" "mu" contento
y el gitano pregunta: ¿a mi y este quien nos "tié" que "pagá"?
Le dicen: el señorito, pero ya se va.
Corriendo sale a la calle y grita:¡ Señorito, Señorito!
A mi quien me va a "pagá".
Este se vuelve molesto y le contesta:
Ya con la cara "cambiá” ¿es que a caso no te has "divertío",
no has "tenío" buena compañía,
y "tas" "jartao" de "cantá"?.
¿Y todavía todavía quieres más? ¡"Enga" ya, hombre!

¡Señorito, señorito! Por "cariá" dame "argo"
aunque solo sea "pa" "podé" "comprá" un puchero,
y que mis niños hoy se "puean" "jartá" de "comé".

No me molestes más gitano , que se hace de día y me tengo que "marchá".

Con lágrimas como puños y casi sin "podé" "hablá",
el gitano al ver que se aleja y que no le vá a pagar, le grita:
¡Señorito, señorito! “Sabes lo que te digo”,
Que Dios te va a "castigá" y la próxima "vé" que cante, quieras "escuchá".
El GORI GORI eso, eso, es lo que te van a "cantá".
Requiescat in pace.

Manuel Antúnez Chacón ( Poemas de Plata)

ANDALUCÍA Y Tú

Embrujo de Andalucía, es tu pelo,
y tu frente, frontera de Andalucía.

De Andalucía tus ojos, sol y la luna,
y tu boca de Andalucía sonrisa.

Despeñaperros, el encuentro de tu barbilla y tu cuello.

Son tus brazos ramas de recios olivos,
y tu pecho, montañas de Andalucía
que descansan en los valles de tu vientre
como abrazo de Ronda y su serranía.

Tus lágrimas, pena de la emigración,
y tus jugos y sudores, ambrosías de las campiñas
jerezana y cordobesa.

El arte de Andalucía son tus manos,
y tus dedos, farolillos de la feria de Sevilla;

tus caderas, meandros del padre río
que hasta Sanlúcar lo llevan.

Y tu pubis, Sacromonte granadino
y Albaicín de misterios escondidos.

Piel morena de tu cuerpo, costa del sol malagueña.
Y tus labios, fruta de la costa tropical.

Puerto del descubrimiento desde Huelva, tu cintura,
Alcazaba de Almería, tu garbo y tu caminar.

Como columna de Hércules son tus piernas
y murallitas de Cádiz tu silueta; y hasta tu sombra
recuerda el mapa de Andalucía.

Tus inquietudes su escudo, tus deseos, su bandera
y el himno de Andalucía, la melodía de tu voz.

Fernando Zamora ( Poemas de Plata)

domingo, 6 de febrero de 2011

GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER


RIMAS Y LEYENDAS

RIMA XXIV
( Dos y uno)

Dos rojas lenguas de fuego
que a un mismo tronco enlazadas
se aproximan, y al besarse
forman una sola llama.

Dos notas que el laúd
a un tiempo la mano arranca,
y en el espacio se encuentran
y armoniosas se abrazan.

Dos olas que vienen juntas
a morir sobre una playa,
y que, al romper, se coronan
con un penacho de plata.

Dos jirones de vapor
que del lago se levantan,
y al juntarse allá en el cielo
forman una nube blanca.

Dos ideas que al par brotan;
dos besos que a un tiempo estallan;
dos ecos que se confunden:
eso son nuestras almas.


XV

Cendal flotante de leve bruma,
rizada cinta de blanca espuma,
rumor sonoro
de arpa de oro,
beso del aura, onda de luz:
eso eres tú.

¡Tu sombra, aérea, que cuantas veces
voy a tocarte, te desvaneces,
como llama, como el sonido,
como la niebla, como el gemido
del lago azul!

En mar sin playas de onda sonante,
en el vacío cometa errante,
largo lamento
del ronco viento,
ansia perpetua de algo mejor:
eso soy yo.

¡Yo, que a tus ojos , en mi agonía,
los ojos vuelvo de noche y día;
yo, que incansable corro y demente,
tras una sombra, tras la hija ardiente
de una visión.


XVIII

Fatigada del baile,
Encendido el color, breve el aliento,
apoyada en mi brazo,
del salón se detuvo en un extremo.

Entre la leve gasa
que levantaba el palpitante seno,
una flor se mecía
en acompasado y dulce movimiento.

Como en cuna de nácar
que empuja el mar y que acaricia el céfiro,
tal vez allí dormía
al soplo de sus labios entreabiertos.

¡Oh, quien así –pensaba-
Dejar pudiera deslizarse el tiempo!
¡Oh!, si las flores duermen,
¡Qué dulcísimo sueño!

XX

Sabe, si alguna vez tus labios rojos
quema invisible atmósfera abrasada,
que el alma que hablar puede con los ojos,
también puede besar con la mirada.

XXI

-¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul.
¡Qué es poesía! ¿ y tú me lo preguntas?
Poesía… eres tú.

XXII

¿Cómo vive esa rosa que has prendido
junto a tu corazón?
Nunca hasta ahora contemplé en el mundo
Junto al volcán la flor.

XXIII

Por una mirada un mundo;
por una sonrisa, un cielo:
por un beso…¡ yo no se
qué te diera por un beso!

Gustavo Adolfo Bécquer


RESURRECCIÓN

Nacer.
Fin de la ceguera y comienzo de la ignorancia.
Tránsito que quema y desgarra la piel. Vano intento de dar sentido a la carne. Gesto de amor hecho conciencia.
Naceré.
En mi infancia Regaré la planta cuyos frutos se convierten en los sueños más irrealizables.
En mi juventud Cruzaré el puente que alivia la pesada carga de la soledad.
En mi madurez Correré hacia una meta que nadie conoce.
En mi senectud Meditaré en silencio en busca de consuelo para las cosas que ya nunca haré.
Y una vez cumplido todo esto, Moriré.
Atravesaré la línea que separa lo visible de lo desconocido y mi alma no descansará hasta encontrar el conocimiento prometido.
No será fácil, no.
Vagaré por los valles y las montañas. Bajaré al centro de la Tierra. Visitaré a nómadas y a gentiles, a mendigos y a doncellas, a pecadores y a meretrices.
Ninguno sabrá nada.
Viajaré entonces al último confín del Universo y Regresaré angustiado preguntándome por qué no puedo alcanzar lo prometido. Por qué no existen paraísos que me cobijen. Por qué sigo siendo un ignorantensi ya abandoné la carne.
Por qué ahora estoy ciego.
Nuevamente, Naceré.
Nacer.
Fin de la ceguera y comienzo de la ignorancia.


José María Martín Torres.


ANDALUCÍA ES MI TIERRA.

Le doy las gracias a Dios
por nacer en Andalucía,
en la tierra de María.
Todo el que viene a mi Tierra
aquí se quiere quedar
por ser bonita y sencilla,
simpática y servicial,
pues las gentes de mi Tierra
te abren el corazón
cuando te dan amistad,
y hasta te abren su puerta
con grabn solidaridad.
Cuando te dicen, "mi arma",
que no se puede aguantar;
"toma una copa conmigo",
van derramando la sal
por que en esta tierra
hay arte "pa" dar y tomar,
si te quedas en mi Tierra,
te va gustar una "jartá".

Nieves Gómez Castellano.

martes, 7 de diciembre de 2010

COPLAS DE CARLOS CANO


VERDE BLANCA Y VERDE

De Ronda vengo lo mío buscando:
la flor del pueblo la flor de mayo, verde, blanca y verde.
Ay, qué bonica verla en el aire, quitando penas, quitando hambres, verde, blanca y verde.
Amo mi tierra, lucho por ella. Mi esperanza es su bandera verde, blanca y verde.
¡Qué alegres cantan las golondrinas! Tierra sin amos, tierra de espigas, verde, blanca y verde.
Cómo relucen las amapolas de Andalucía trabajadora, verde, blanca y verde.
Amo mi tierra, lucho por ella.
Mi esperanza es su bandera verde, blanca y verde.


HABANERAS DE CÁDIZ

Desde que estuve, niña, en La Habana
no se me puede olvidar
tanto Cádiz ante mi ventana, Tacita lejana,
aquella mañana pude contemplar...
Las olas de la Caleta, que es plata quieta,
rompían contra las rocas de aquel paseo
que al bamboleo de aquellas bocas
allí le llaman El Malecón...
Había coches de caballos, que era por mayo,
sonaban por la Alameda, por Puerta Tierra,
y me traían, ay, tierra mía,
desde mi Cádiz el mismo son...
El son de los Puertos, dulzor de guayaba,
calabazas, huertos...
Aún pregunto quién me lo cantaba...

Estribillo
Que tengo un amor en La Habana
y el otro en Andalucía,
no te he visto yo a ti, tierra mía,
más cerca que la mañana
que apareció en mi ventana
de La Habana colonial
tó Cádiz, la Catedral, La Viña y El Mentidero...
Y verán que no exagero
si al cantar la habanera repito:
La Habana es Cádiz con más negritos,
Cádiz, La Habana con más salero.

II
Verán que tengo mi alma en La Habana
no se me puede olvidar,
canto un tango y es una habanera,
la misma manera
tan dulce y galana y el mismo compás.
Por la parte del Caribe así se escribe
cuando una canción de amores, canción tan rica,
se la dedican los trovadores
a una muchacha o a una ciudad...
Y yo, Cádiz, te dedico y te lo explico
por qué te canto este tango que sabe a mango,
de esta manera esta habanera
de piriñaca y de Carnaval...
Son de chirigota, sabor de melaza,
Guantánamo y Rota...
¡Que lo canta ya un coro en la plaza!

LUNA DE ABRIL
Abril para vivir, abril para cantar,
abril flor de la vida al corazón.
Abril para sentir, abril para soñar,
abril la primavera amaneció.
La luna fue en abril, en abril fue el amor,
que un día entre las rosas despertó.
Toda mi soledad, de flores se llenó,
dejando por el aire esta canción.
Como una golondrina por el mar se perdió.
Como una golondrina el amor se llevó.
Y me dejó el dolor para cantar.
Y la luna de abril para olvidar.
Aquel lucero azul, de tu boca la flor,
se levantó por el amanecer.
Donde se muere el mar de mis ojos te amé
y a tu cuerpo de alondra me abracé.
Abril para vivir, abril para cantar,
abril flor de la vida al corazón.
Abril para sentir, abril para soñar,
abril para encontrar un nuevo amor.
Como una golondrina por el mar se perdió.
Como una golondrina el amor se llevó.
Y me dejó el dolor para cantar.
Y la luna de abril para olvidar.
Y me dejó el dolor para cantar.
Y la luna de abril para olvidar

MARÍA LA PORTUGUESA

En las noches de luna y clavel
de Ayamonte hasta Villareal
sin rumbo por el río, entre suspiros
una canción viene y va
Que la canta María
al querer de un andaluz.
María es la alegría, y es la agonía
que tiene el sur.

Que conoció a ese hombre
en una noche de vino verde y calor
y entre palmas y fandangos
la fue enredando, le trastornó el corazón.
Y en las playas de isla
se perdieron los dos
donde rompen las olas, besó

Ay, María la portuguesa
desde Ayamonte hasta Faro
se oye este fado por las tabernas
donde bebe viño amargo
porque canta con tristeza
porque esos ojos cerrados
por un amor desgraciado,
por eso canta, por eso pena.

¡Fado! que me faltan sus ojos
¡Fado! porque me falta su boca
¡Fado! porque se fue por el río
¡Fado! porque se fue con la sombra

Dicen que fue el te quiero
de un marinero, razón de su padecer
que en una noche en los barcos
de contrabando, p'al langostino se fue.
Y en las sombras del río,
un disparo sonó.
Y de aquel sufrimiento, nació el lamento
de esta canción.

DE CÓMO ANTONIO MACHADO RESUCITA
Nadie se mueva! ¡Manos arriba! ¡Quédense quietos!
¡La poesía ... ! ¡Vayan saliendo topos del nido, que la alegría os ha vencido!
Hay que ver lo que trae la razón: Corazón.
Hay que ver lo que cuesta callar: Vomitar.
¡Vamos Neruda, pase al siguiente!
Si se resiste, déle Picasso, silencio y versos de la montaña y una paloma con cuatro caras.
Hay que ver lo que trae la verdad: Claridad.
Hay que ver lo que dice el clavel: A por él.
Una paloma con cuatro caras, con quince ojos, con veinte alas, con mucho cielo, con treinta bocas.
Y todos digan: ¡García Lorca!
Hay que ver lo que trae la verdad: Libertad.


LA MISERIA

La miseria Vengo de abajo, cansado de tanta cuesta.
Vengo, no sé a dónde voy, huyendo de ella.
LA MISERIA Tiene en su casa las uñas de la soberbia.
ve en un mundo cerrado del que se alimenta.
LA MISERIA Es el lugar donde nací, donde no quiero yo morir.
Es un lugar muy especial para el amor y la moral.
LA MISERIA Vengo de abajo, de un valle podrido de yerba, donde no existe el futuro, sólo LA MISERIA

EL SALUSTINO

Hasta un pueblo d'Alemania ha llegao el Salustiano
con más de cuarenta años y de profesión el campo,
pa buscarse l´habichuela y ahorrar algunos marcos
y que pueda la parienta comprar algunos marranos.
Yo no creo que el sombrero les toque en la tómbola
a esos gachós trajeados que viven de na.
Que lo roban, lo roban, con cuatro palabritas finas lo roban.
En principio se hace dura sobre to la soleá,
esa gente chamullando no se le entiende ni atá.
Menos mal que algunas veces la embajada cultura]
les manda al Julio iglesias y a un tal Manolo Escobar.
Yo no creo que el sombrero les toque en la tómbola
a esos gachós trajeados que viven de na.
Que lo roban, lo roban, con cuatro palabritas finas lo roban.
Y así s'acaba la historia del güeno del Salustiano
de tanto apencar los güesos otro gallo l'ha cantao.
Gallo dice que l'obrero de cachondeo está jarto,
si no hubiera ido a Alemania, no hubiera aprendido tanto.
Yo no creo que el sombrero les toque en la tómbola
a esos gachós trajeados que viven de na.
Que lo roban, lo roban, con cuatro palabritas fina

LA MURGA DE LOS CURRELANTES

Ay Señor la que armaron la que liaron con la salía la masonería
y la subversión 1a pelota, los toros, la lotería y las quinielas e seílla, las letras el televisor.
Yus pikingli'r, turismo, sofico, renta, los alemanes bombas en Palomares
-¡vaya por Dios! Y ahora con e destape de teta y trota los camuflajes las serpientes con traje de santurrón.
Y es que las dentaduras ya no están duras pa estas güesuras
y llega la rotura y el personal qu'asentao endiquela
como se jalan de carca a carca mientras cuecen las haban suelta el cantar:
¡María! coge las riendas e lSi trabajo'autonomía
¡Marcelo! que los paraos quieren currelo
¡Manué! ¿con el cacíque qué vas a hacer?
pos le vamos a dar con el tran tracatrán pico pala -ichimpón!-
y a currelar parabán parabán parabán pan pá.
Estribillo Esto es la murga los currelantes
qu'al respetable güenamente va'xplicar el mecanismo tira palante
de la manera más bonita y popular:
s'acabe el paro y haiga trabajo escuela gratis,
medicina y hospital pan y alegría nunca nos falten.
Que güervan pronto los emigrantes haiga cultura
y prosperiá.
¡Maroto! siembra la tierra que no es un coto
¡Falote! que ya'sta bien de chupar del bote
¡Ramón! hay q'acabar con tanto bribón pos le vamos a dar el tran lacatrán pico pala
-¡chimpón!- y a currelar parabán parabán parabán pan pá.

EL REY AL-MUTAMID DICE ADIOS A SEVILLA
Habibi en esta incierta hora
cuando ya mi corazón dice adiós a este tiempo, habibi
Y Ala me llama en el silencio
mientras se oye por el aire
el vuelo de los buitres esperando.
Nadie llore por mí,
si acaso en el recuerdo algunos versos.
Que yo fui un gran señor
que tuvo un reino hermoso junto a un río.
Sevilla, Sevilla ay qué lejos.
Ay Sevilla, la única cadena que yo siento.
Cadena, si yo a ti me entregué
¡ten piedad de mí! Cadena habibi damma-ni damma habibi...